DÍA 4 QUE FUERA

La frase popular "Día 4 que Fuera" hace referencia a la víspera de las Fiestas de Moros y Cristianos de Villena.

Hasta los años sesenta, las fiestas comenzaban el día 5 de septiembre por la mañana con la Fiesta del Pasodoble, y fue en esa década cuando se añadió el pregón de fiestas. Por eso, el día 9, después de despedir a la Virgen por la mañana y de celebrar la entrada de Nuevos Capitanes y Alféreces; y el intercambio de bandas, por la tarde, la gente decía popularmente "día 4 que fuera", expresando así su deseo de que las fiestas empezaran de nuevo ese mismo día, es decir, que o terminaran.

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Día 4 que FueraActualidad Nunca es tarde…si hay fiestas que tratar

Nunca es tarde…si hay fiestas que tratar

Ya dice el refrán que más vale tarde que nunca, y como para hablar de fiesta  cualquier momento es bueno, no podíamos comenzar el año festero 2018 sin antes hacer una “vista rápida” por estas fiestas 2017, unas fiestas que han sido las 1º de nuestra estrenada directiva y que han estado llenas de cambios y anotaciones para seguir mejorando y trabajando por y para la fiesta.

Para comenzar, el día 3 logramos numerar las mesas para disfrutar de una cena más relajada y como a “falta de patatas buenas son longanizas” con los estómagos llenos disfrutamos del recorrido habitual,  finalizando con unos magníficos alféreces y el ruedo de esas banderas cuyos colores relucían al vuelo. Al día siguiente sacamos nuestras mejores galas  para disfrutar de la cena de gala y los castillicos que contemplamos (lo poco que había que contemplar),  desde nuestra terraza.

       

Tras despertar el día 5 con las diferentes melodías que las bandas de música tocaban  a lo largo y ancho de nuestra ciudad,  los nazaríes cumpliendo la tradición nos dirigimos con nuestra banda oficial de Belgida a casa de  nuestras madrinas, mayor e infantil respectivamente, allí donde las emociones ya estaban a flor de piel y ambas lucieron tan bonitas  durante el desfile de la  fiesta del pasodoble, como los ramos de flores que portaban en sus brazos.

 

Los nervios ya eran palpables a cada paso, en cada gesto, cada mirada y entonces llegó la “Entrada” y tras el desfile, el jolgorio toca a la puerta para disfrutar de nuestra Alhambra tras la caída del sol.  Con el amanecer la inocente sonrisa infantil nos anuncia que hoy es su día, el día de nuestros pequeños grandes nazarís, aquellos que son el futuro  y la alegría de nuestra Alhambra.   Y cuando el sol se oculta, con cabalgata llegan los boatos, bailes, alegría y color, nuestros manteros y manteras salen orgullosos luciendo sus colores, y nuestras escuadras especiales lucen más que nunca en esta bonita noche sus majestuosos trajes, todo una seña de espectáculo y color en forma de fiesta, nuestras fiestas

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La alarma suena temprano el día 7 para que nada nos impida probar el tan famoso codillo de nuestros almuerzos, decidimos a última hora conseguir un bonito ramos de flores y participar en la ofrenda para que los actos solidarios no cesen, y nuestra patrona luzca su moreno entre ese aroma de flores y alegría. Seguidamente nos vamos a disfrutar del aperitivo y la comida antes que la música se apodere de nuestro escenario.  Un día especialmente dulce gracias a la increíble y fantástica mesa de golosinas a cargo de nuestros cargos infantiles, la cual no paso desapercibida para nadie, sobre todos para los más pequeños, bueno…y para los no tan pequeños tampoco. Y nuestros altavoces anunciaron que esta sería una gran noche de estreno para nuestra comparsa, una vez la tarde iba cesando, fue muy buena la acogida que tuvo la iniciativa de una primera retreta organizada,  así pues disfrutamos de una cena tranquila junto al fiel grupo retretero nazarí “El Harén” y una vez todos estábamos dispuestos con nuestro traje salimos a disfrutar como solo en nuestra comparsa sabemos hacer. Además con la bonita y trabajada torre del orejón que nuestros compañeros prepararon, pasamos una retreta muy divertida, desde aquí agradecer a todos aquellos que nos acompañaron y como no a todos los que desde tras el telón trabajaron para que esta pudiese llevarse a cabo. Os esperamos al año que viene!!

  

Amaneció un día 8 con signos evidentes de excesos y fiesta de 4 días, pero una vez superamos la misa…..y a pesar del calor que no parecía a favor de darnos mucha tregua nos dirigimos de camino al castillo a esperar a nuestros arcabuceros y apollarlos en esta dura derrota de la caída del bando moro.  Y al llegar la noche acompañamos a nuestra patrona durante el desfile de la procesión hasta culminar este día con su entrada en Santiago y el ruedo de banderas de nuestros alféreces mayores que disfrutaron de ese gran honor.

    

Amanecimos un día 9 con la mirada llena de nostalgia, y unas primeras lagrimas que derramadas nos decían que era el principio del fin, ya comenzando el desfile de despedida de la virgen sentíamos que pese al cansancio todo comenzaba a alcanzar el fin. Aun así pintamos nuestra mejor sonrisa y con alegría y garbo disfrutamos de ese último desfile de nuestra patrona, que abandono nuestra bonita Villena sin mirar atrás, sabiendo que al próximo año sus fieles volverán igual que año tras año vuelven nuestras queridas fiestas.   Y de esta forma nos dispusimos a disfrutar del último almuerzo en nuestra comparsa, intentando retener sabores, aromas, intentando parar las horas de ese reloj que dejamos en casa el día 4 de septiembre, y cuyas agujas vuelven a retomar su ritmo. De esta forma tras meter algo en esos estómagos ya nerviosos y emocionados al tiempo, unas nuevas caras sonríen abrazando la emoción de aquellos rostros que se despiden. Así comienza nuestro último desfile en estas fiestas 2017, el último también para nuestros cargos festeros 2017, que abren comparsa junto a ellos, nuestros nuevos cargos para las fiestas 2018 cuyo rostro refleja el sueño que aquí comienzan.

                        

Desde estas líneas quería aprovechar para dar un gran y personal GRACIAS,  Elisa, cada uno de tus detalles te hace especial, porque cada flor, cada gesto, cada foto ha sido un regalo sincero que este año he compartido junto a ti, gracias por cada detalle, por pensar en todo y todos. Gracias por ser tú.

Y entonces apareció la luna, allí en lo alto del oscuro cielo, donde con su reflejo enmudecía a cualquiera. Ella fue testigo del gran momento en que nuestros nuevos cargos tomaron posesión de sus bandas,  esas que las acompañarían durante el próximo año que aquí comenzaba.  Y para finalizar tan solo felicitar a todos y cada uno de los socios que formamos esta pequeña-gran comparsa por ese segundo premio, porque el valor no reside en la meta última del camino, sino del trayecto que has recorrido para lograrlo, y sin duda con o sin premio nuestro trayecto ha sido el mejor que podíamos tener.

ENHORABUENA NAZARIES.

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