A las “Armas: Las Virtudes de María

Se insta desde la JCF, (en adelante Junta Central de Fiestas), a elaborar un artículo de esos “apañaícos” para el boletín digital D4F, (en adelante Día 4 que Fuera), al cronista de la JV, (en adelante Junta de la Virgen), acerca de un tema singular, específico y atrayente, de esos que invitan a investigar, escudriñar y levantar la alfombra por si acaso ya hubiera algo “barrido” anteriormente. El monográfico será el Acervo, que sería algo así como el conjunto de valores o bienes culturales acumulados por tradición o herencia.

El caso es que los cronistas, a instancias de la JCF, cada vez “acervamos” de una manera diferente, es decir, vamos al baúl de los recuerdos y sacamos temas variados que se encajan en el mosaico festero de la historia. El tema para este año y en esta sección, consiste en escribir acerca las “armas” de las comparsas y su tradición .Sí, hombre, sí… esas que llevan los festeros en los desfiles de esta fidelísima ciudad, y que cuando acaban, nadie sabe que hacer con ellas. Caro que sí, mujer… ya sabemos… una “lancica” por aquí, un arcabuz por allá, que si aquellos vienen con la espingarda, que si aquellas con la fusta, hay quien hace “chas” y aparece “justico” a tu lado con el pico, la mochila y el “quesito”, que si vienen los del hacha o ballesta, las del ramo de plumas de pavo o vaya “usté” a saber.

El caso es que el cronista de la JV se encuentra “cariacontecido” por no decir en un brete, apuro, aprieto, dificultad, conflicto, compromiso, problema, atolladero, trance o agigolón, todo eso mezclado que no agitado, en un momento alejado de musas y rizando el rizo para intentar acabarlo en tirabuzón. Establezco pues un “brainstorming” o lluvia de ideas, en este caso sería más correcto decir tormenta o temporal, para ver que se puede sacar de la chistera hace tiempo agotada de pichones y conejos.

Es por ello que lo primero y principal es “arretratarse”…

Converso con el hombre que siempre va conmigo
—quien habla solo espera hablar a Dios un día—
mi soliloquio es plática con este buen amigo
que me enseñó el secreto de la filantropía.

Dejando bromas aparte, y no precisamente por los versos de Machado, me pongo serio, me arremango, miro fijamente con saña el monitor y de reojo al teclado, obvio al ratón ya que hay mucha gente que le da “repelús”, busco tema y comienzo, ahora sí, a escribir…

Empezamos fuerte, ya que apelo a Santo Tomas de Aquino, y cambio de registro para darle la oportuna solemnidad que merece este escrito… “el mundo físico no es más que una metáfora corpórea de la realidad espiritual”. Y pensando con naturalidad acerca de la temática de este Acervo, pienso en armas y creo que las de Nuestra Patrona no pueden ser otras que aquellas que marcan la Fe y el sentimiento, y a La Morenica la identifican, sin duda, sus Virtudes.

Aunque la Virgen María no solo se identifica con sus Virtudes. Es Madre, Maestra, Doctora, Virgen, Viuda, Hija, Esposa, Consejera, Corredentora, Intercesora y Administradora. Así lo expuso Juan Pablo II el día 15 de agosto de 1988, en su carta apostólica “Mulieres dignitatem», con ocasión de la celebración del Año Mariano. 

Pero volvamos a esas armas que he llamado de “Fe y sentimiento”. Unos elementos definidos y ligados a la iconografía, que sería entendida como esa forma de escribir en imágenes. Un lenguaje muy rico, pero en ocasiones difícil de entender. La iconografía mariana, la que es relativa a la Virgen María, puede estructura su temática en tres argumentos fundamentales, cuya simbología se destaca en el siguiente resumen, muy escueto y de la que siempre se habla en los salmos…

Primer argumento. La Virginidad perpetúa: representada como Fuente sellada, Espejo de Justicia, Espejo sin mancha, Templo de Dios, Lirios blancos, ciudad amurallada, luna llena, huerto cerrado y todos los árboles que conservan su verdor, ciprés, olivo y palmera, que es símbolo de inmortalidad. 

Segundo argumento. La pureza Inmaculada: representada por el sol, las rosas y la Torre de David.

Tercer argumento. La intercesión en favor del género humano: Puerta del Cielo, Estrella del Mar y Escalera del cielo, también conocida como la escalera de Jacob.

Simbología importante, que podemos encontrar en infinidad de mantos de nuestra Patrona, en la iglesia de Santuario y en su camarín. Incluso algunos muy particulares y originales, como es el caso del Manto de indias y sus famosos insectos entrelazados entre cadenas, que rodean algunos de estos símbolos marianos y que ofrecen una rica iconografía.

“Armas de Fe y sentimiento”. Las Virtudes de María. Si existe un lugar en Villena donde estas se pueden apreciar en todo su esplendor repleto de simbología y que están ligadas íntimamente a la Sagrada Imagen de Ntra. Sra. María de las Virtudes, es la cúpula del Camarín del Santuario. Allí se encuentran representadas sus Virtudes, tres denominadas teologales, cuatro cardinales y una última evocada como Gracia Divina. Pero veamos…

En la religión católica, se llaman Virtudes Teologales a los hábitos que Dios infunde en la inteligencia y en la voluntad del hombre para ordenar sus acciones. Tradicionalmente se cuentan tres: la Fe, la Esperanza y la Caridad, se reciben en el bautismo y disponen a los cristianos a vivir en relación con la Santísima Trinidad. Estas virtudes son muy citadas en el Nuevo Testamento, particularmente en la Primera Carta del Apóstol San Pablo a los Corintios (13-13). Como son conceptos abstractos, la iconografía recurre al uso de alegorías para hacerlas visibles y estas han sido representadas en muchas obras de arte religioso en todas las épocas y con todos los estilos.

En el Camarín de la Virgen de las Virtudes sito en el Santuario al alzar la vista hacia su cúpula, nos encontramos a la Fe, revestida de blanco y con los ojos tapados. Sostiene con su mano derecha un cáliz mientras levanta con la izquierda una cruz. Por otro lado la Esperanza, que se encuentra representada mediante una joven con las manos juntas dirigidas hacia el cielo, al igual que su mirada. Lleva también un atributo, el ancla, símbolo de la salvación del alma. Si seguimos buscando la última virtud teologal, nos faltaría la Caridad, que es la figura de una mujer que sostiene a varios niños en brazos y que se dispone a amamantarlos. Es símbolo del amor que se orienta hacia Dios y sus criaturas.

Por lo que respecta a las virtudes Cardinales, estas serían cuatro, Prudencia, Justicia, Fortaleza y Templanza.

Al volver a levantar la vista hacia la cúpula del camarín la Prudencia, de acuerdo al simbolismo cristiano, esta representada por una matrona que lleva un espejo, emblema de la reflexión y el conocimiento de uno mismo, y una serpiente, emblema de la astucia. Podemos ver también la representación de la Justicia, que es una llama de fuego sobre la palma de una mano y, en la otra, un libro y una cruz. Según el Cesare Ripa, autor del tratado más importante de Iconología publicado en 1593, la llama mostraría que la mente del Juez debe estar siempre enderezada hacia el Cielo. En cuanto a la Fortaleza el símbolo que es el elegido en el Santuario, es una mujer robusta que sostiene con su mano derecha una columna, aludiendo así a la destrucción del templo por Sansón como elemento más fuerte del edificio y el que sostiene toda su arquitectura. La cuarta virtud que nos quedaría por descubrir sería la Templanza, que alude al dominio de las pasiones con una mujer a la que se le ha añadido una cabeza de un elefante, animal vinculado con la castidad, junto a unos lirios y un sol que luce sobre su pecho.

Por último y para finalizar con esta serie iconográfica que busca exaltar y representar las Virtudes de María, acabaríamos con la evocación de una imagen concepcionista: la Gracia Divina. Con una mujer joven y bella que tiene la mirada dirigidos hacia el cielo y los brazos levantados con la paloma del Espíritu Santo sobre su cabeza, lo que implica la aceptación de la misión a la que Dios la ha destinado.

Esta simbología, si bien se encuentra extendida en otras muchas representaciones, son peculiares de la época en que están pintadas y “exclusivas” en cada templo. Es por ello, que se podría decir que la representación pictórica de las Virtudes de María en el Camarín del Santuario son únicas e irrepetibles, a veces totalmente distintas con pinturas de otros lugares y diferentes con similitudes en pequeños detalles.

Y estas serían las armas de cualquier cristiano que tenga devoción hacia su Patrona, debería conocer, las Virtudes de María. Esas armas que he llegado a llamar de “Fe y sentimiento”, las que cada uno llevamos en nuestro corazón. Una simbología digna de destacar y que es parte de nuestro Patrimonio en cuanto a lo material y de nuestra vida en lo espiritual.

Dicen que las comparaciones siempre son “odiosas”, no obstante en este caso me ha dado pie a establecer, bajo mi punto de vista, un símil acertado. Cualquier excusa es valida para recuperar patrimonio y sentimiento, para recordar historia y devoción. Así que el cronista del JV ha a escrito un artículo para la JCF y se publicará en el boletín D4F en su apartado “acervando” que es gerundio. Me quedo con eso…

Toni López, Cronista JV

• Bibliografía
• Política, Fe y cultura en el entorno levantino,
• El camarín del Santuario de la Virgen de las Virtudes: aspectos formales e iconografía.
• Aguaclara libros SL. Gráficas Ulzama ( Navarra) 2018